Quiero enseñaros a preparar esta receta de ventresca de salmón a la plancha con guarnición de kale crujiente y boniato asado, con una sorprendente mezcla de texturas y su efecto saciante. Resulta perfecta para una cena o para comer a mediodía.
Al comprar un salmón, suelo sacar yo mismo la parte de los lomos como os expliqué aquí, que son más gruesos, para cocinar con ellos platos como la receta más fácil de salmón al horno, y guardar la parte de la ventresca, que es más fina y más grasa, para hacer con ella recetas de sushi o sashimi, o para otras recetas.
Hoy vamos a cocinar la ventresca a la plancha como ahora os explico. Es una parte del salmón tan jugosa, que con dos minutos la tendremos lista para servir con esta original guarnición. El centro quedará jugoso de verdad y la parte externa, dorada como se ve en la imagen.
En una sartén muy caliente doramos los filetes de salmón de la parte de la ventresca, durante dos minutos por cada lado, apagando después y dejando que se terminen de cocinar con el calor remanente.
Pelamos el boniato y le cortamos en varitas, como si fueramos a hacer patatas fritas. Cortamos las hojas de kale -o las kalettes si son las que encontramos en la frutería-, las sazonamos ligeramente y las horneamos repartidas en la bandeja del horno durante 25 minutos a 190ºC, vigilando para que no se quemen. Hará falta dar la vuelta de vez en cuando.
Mezclamos las guarniciones y las aliñamos con una cucharada de aceite de oliva virgen extra y sal y pimienta al gusto. Mientras tanto, metemos dos minutos en el horno los filetes de salmón que teníamos reservados, para que tomen temperatura.
Cortamos cada filete de ventresca de salmón en dos porciones y lo servimos con su guarnición, poniendo un bol con más boniato y kale para que quien quiera pueda servirse un poco más. Espolvoreamos el salmón con flores comestibles y comemos inmediatamente.
Con qué acompañar la ventresca de salmón a la plancha con guarnición de kale crujiente y boniato asado
Para acompañar esta receta de ventresca de salmón con kale crujiente y boniato asado, os recomiendo un vino blanco fresquito de vuestra zona, aunque podéis utilizar cualquier vino de vuestro agrado. Preparad aparte un postre rico como unas porciones de leche frita con azúcar y canela, y ya tenéis listo un menú completo.
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