Siempre decimos que para hacer cosas buenas no hace falta estar todo el día metidos en la cocina. Es verdad que también nos gusta liarnos la manta y, si hace falta, pasarse unas cuantas horas en la cocina haciendo virguerías o montando el postre más espectacular. No nos importa. Sin embargo otras veces se agradecen recetas tan sencillas con las de estos muffins de limón y semillas de amapola que encima están deliciosos.
En otras ocasiones habíamos probado la combinación de naranja y semillas de amapola, así que el cambio de cítrico nos ha parecido perfecto y no nos hemos equivocado. El limón le da un toque maravilloso a estos muffins. El resultado es muy rico y recomendable. Las semillas de amapola las podéis encontrar en cualquier herboristería sin problema a un precio económico, además os durará la bolsita mucho tiempo ya que cunde bastante.
Calentamos el horno a 180º con calor arriba abajo sin aire. Batimos el azúcar con los dos huevos, la ralladura de limón y las semillas de vainilla. Agregamos poco a poco, y sin dejar de batir, la mantequilla derretida tibia y el zumo de limón. Añadimos en tres veces la mezcla de harina e impulsor tamizada. Mezclamos bien y echamos las semillas de amapola.
Pasamos la masa con cuidado a las cápsulas de muffin, llenándolas 3/4 partes de su capacidad. Horneamos los muffins a 175º durante unos 25 minutos o hasta que estén dorados. Sacamos del horno y dejamos enfriar antes de consumir. Si disponemos de una bandeja para muffins los hornearemos en ella, y una vez sacados del horno dejaremos unos minutos dentro antes de pasarlos a una rejilla.
Con qué acompañar los muffins de limón y semillas de amapola
Estos muffins de limón y semillas de amapola tienen una textura muy especial, justamente por las semillas, el sabor de los cítricos las acompañan muy bien, así que os encantarán. Como este tipo de masas conservadlos en una lata para que no les dé el aire y se mantengan tiernos durante el mayor tiempo posible.
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