Ya compartimos aquí las bondades de la versión vegana, con coliflor, de una receta muy popular en Filipinas, pero nos faltaba probar la más genuina, el pollo en adobo filipino. Se dice que es la receta favorita de Megan Markle, pero es un plato tan sencillo y tan extraordinariamente sabroso, que brilla por sí mismo por méritos propios. Un imprescindible para los amantes del noble arte de mojar mucho pan.
El pollo en adobo consiste en una especie de guiso o pollo en salsa de la que existen multitud de variantes en Filipinas, pues es de esas recetas caseras en las que cada familia se hace diferente. Además del ave, hay dos ingredientes básicos, la salsa de soja y el vinagre, además de algunas especias comunes también en Europa, como el laurel y la pimienta.
A pesar de que se puede añadir cebolla, azúcar o miel, y de que muchos recomiendan dejar el pollo en maceración, hemos seguido las indicaciones de Mark Bittman, que son extremadamente sencillas. El resultado es sorprendente, sabrosísimo, y sin duda merecerá la pena probarlo también con otras carnes, como el cerdo.
Atemperar un poco el pollo, retirar posibles excesos de grasa y secar con papel de cocina. Aderezar con pimienta molida. Picar finos o machacar los ajos pelados. Mezclar en una cazuela (mejor si puede ir al horno) la salsa de soja, el vinagre, los granos de pimienta negra, los ajos, el laurel y la mitad de la leche de coco o nata. Remover con varillas hasta integrar.
Calentar y llevar a ebullición. Incorporar el pollo, bajar el fuego y tapar. Cocinar durante 20 minutos, dando la vuelta al pollo dos o tres veces. Apagar, retirar la tapa y sacar el ave, escurriendo las piezas, y depositar sobre un plato con papel de cocina. Encender el grill del horno o precalentar a 240-250ºC.
Retirar el laurel y añadir el resto de leche de coco, mezclando con las varillas. Llevar la cazuela a la rejilla superior del horno y dejar que reduzca la salsa hasta que quede espesa y caramelizada, unos 15-20 minutos. Retirar y reservar caliente, tapada.
Disponer el pollo sobre una bandeja ligeramente engrasada y gratinar en la misma posición, hasta que la carne esté bien tostada, sin quemarse. Girar las piezas a mitad de la cocción, con mucho cuidado pues el horno estará muy caliente. Servir el pollo con la salsa.
Con qué acompañar el pollo en adobo filipino
La suculenta salsa de esta receta de pollo en adobo filipino pide una guarnición neutra y rica en almidón para aprovecharla. El arroz tipo basmati es sin duda una gran opción, aunque recomendamos también un sencillo puré de patatas cremoso, o simples patatas pequeñas cocidas para servirlas chafadas y bañadas en la salsa. Además, que no falte el pan en la mesa.
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