El aroma del romero no es la única ventaja que tiene para que contemos con esta planta a la hora de decorar la cocinar. Este arbusto tan mediterráneo tiene otras posibilidades y ventajas y, ahora que la primavera está a la vuelta de la esquina, hay que considerarlo como una posibilidad.
En las próximas semanas los centros de jardinería estarán desempolvando sus carritos para la avalancha de amantes de las plantas que acudirán a sus puertas en busca de plantas que decoren sus espacios y, por qué no, aporten otras propiedades.
Dentro de las amplias posibilidades de elegir plantas adaptadas al clima mediterráneo, hay numerosas opciones entre las que escoger. Además, hay que tener siempre en cuenta las necesidades de riego y la cantidad de luz que requiere cada especie, en relación a las que la vivienda o la estancia concreta donde se alojarán puede ofrecerles.
Para aquellos que buscan una planta versátil, que aporte valores diferentes a su cocina, el romero es una gran opción, pues puede ofrecer más que otras plantas que, simplemente, son decorativas sin mayores pretensiones.
Un toque rústico
En primer lugar, sus hojas, son super aromáticas. Este es uno de los grandes motivos para elegirlas. El olor característico de las ramas de romero llenará la estancia en un embriagador perfume mediterráneo.
Otra ventaja es que sus hojas son perennes, de manera que no ensuciará a su alrededor y siempre tendremos una planta revestida, dando un toque sofisticado. Asimismo, estas hojas conservan su color verde intenso durante todo el año, lo que garantiza en la cocina un plus de color los 12 meses del año.
Como elemento añadido, florece dos veces al año, en primavera y en otoño, con unas bonitas y pequeñas flores de color azul claro con manchas violetas. Tanto las hojas como las flores dan un toque rústico al conjunto.
Otra ventaja es que esta es una de las plantas aromáticas más usadas en la cocina, pues sus sus hojas (tanto frescas como secas) se usan para condimentar carnes, asados, guisos de pescado y salsas, como las de tomate o bechamel, y en escabeches. Incluso, con ellas se puede preparar un aliño de aceite de oliva, al que se le pueden añadir las flores, y usar en ensaladas.
Según el Ministerio de Agricultura, sus propiedades aromáticas y saborizantes no son la única ventaja, pues esta planta es una fuente de nutrientes y de otros componentes que añaden complejidad a las comidas, como taninos, ácido rosmarínico y hierro.
Aunque la ración de romero usada en gastronomía es pequeña para comportar aportes significativos de nutrientes en la dieta, los que más destacan por su contribución a las ingestas recomendadas son: el hierro (2% de las IR en hombres y 1% en mujeres) y la vitamina B6 (1% de las IR para hombres y mujeres).
Una mata de esta planta en casa abastece fácilmente a toda una familia. Además, su cultivo en tiesto, es fácil cuando este es suficientemente grande. En concreto, esta planta se tiene que resguardar de las temperaturas bajas y heladas.
Otra de sus ventajas es que no se trata de una planta exigente porque solamente necesita sol (eso sí) y suelos secos, por lo que el riego no debe suponer un problema, sino más bien un alivio en tiempos de sequía.
Finalmente, otra de sus ventajas es la que acaba de poner negro sobre blanco la Universidad de Harvard: esta planta mejora la memoria y el estrés, según las investigaciones de una psiquiatra de la universidad, por lo que ayuda a cuidar también de la salud mental.
Foto | jcomp/Freepik y Leeloo The First/Pexels.
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