Tal vez porque es un producto muy típico de Ibiza y lo he comido desde niña, pero a mí me encantan los calamares y especialmente si están guisados a fuego lento, como en esta receta de calamares rellenos de carne picada y piñones. Nos gustaron tanto que la próxima vez que los prepare haré más cantidad para poderlos congelar.
Además, es una forma "encubierta" de que mis hijos se coman las patas y los alerones de los calamares, pues no les gustan nada y cuando los preparo de otra forma siempre consiguen dejarlos ¿Adivináis quién se los acaba comiendo siempre? Pues sí, por eso sonreí (con disimulo) cuando vi que no se dieron cuenta de mi pequeño engaño.
Empezamos limpiamos bien los calamares, troceando menudos los tentáculos y las alas. Mezclamos este picadillo con las carnes y le añadimos la miga de pan empapada con la leche y escurrida y los piñones. Salpimentamos e incorporamos la picada de ajo y perejil. Rellenamos los calamares con esta farsa y los cerramos con un palillo.
En una cazuela ponemos aceite de oliva, echamos los calamares y les damos unas vueltas, los sacamos y reservamos. Añadimos la cebolla picada y dejamos que se dore, incorporamos los tomates y cuando se hayan confitado un poco, el pimentón y el resto del relleno si ha sobrado.
Le damos unas vueltas, incorporamos los calamares y el vino blanco, rectificamos de sal y dejamos que se cocine hasta que los calamares estén hechos. Si vemos que hace falta podemos también añadir un poco de agua. Para que quede una salsa menos espesa podemos pasarla por el chino.
Con qué acompañar los calamares rellenos de carne picada y piñones
Me gusta mucho servir esta receta de calamares rellenos de carne picada y piñones con arroz blanco hervido, creo que una vez se mezcla este con la salsita de los calamares queda una combinación exquisita, aunque con otra guarnición, como patatas fritas o una ensalada verde, están igual de deliciosos.